5 de Diciembre de 2018
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Davivienda rinde homenaje a Manolo Vellojín Bogotá, Noviembre-Diciembre 2018. Hace más de quince años Davivienda publica de manera anual su libro de arte, destacando la vida y obra de grandes maestros, que han dejado huella en la historia del arte colombiano. El turno este año es para Manolo Vellojín, importante pintor barranquillero.
Vellojín fue un autodidacta, que desde su infancia, estuvo seducido por la ornamentación de los rituales y ceremoniales fúnebres de la religión católica. Su obsesión por el orden y la perfección fue mucho más allá de su cotidianidad, convirtiéndose en su forma de expresión a través de composiciones geométricas regidas siempre por una absoluta simetría.
Su primera exposición individual se llevó a cabo 1969 en la ciudad de Bogotá y desde entonces su trabajo se consolidó como una de las propuesta más sólidas del arte abstracto geométrico durante cuatro décadas de actividad pictórica.
Aunque no es fácil identificar con claridad las emociones e intenciones plasmadas en las obras de Vellojín, pues la abstracción y la geometría fueron su herramienta para lograr una conexión con sí mismo, sus preocupaciones más profundas tuvieron siempre que ver con la espiritualidad y la búsqueda del sentido de la vida y como él mismo lo afirmó, procuraba con sus pinturas “transfigurar un sentimiento”, tal vez queriendo sugerir la necesidad de descubrir la verdadera esencia de sus pinturas geométricas.
Una de las curiosidades que enmarcó la reputación del barranquillero fue el ferviente rechazo a comercializar sus obras, con la analogía de que un padre no vende a sus hijos, además de su obsesión por la perfección y el rigor de sus conceptos.
Tras cuatro décadas dedicadas al arte, en 2013 y luego de una corta enfermedad, que prefirió mantener en secreto, Vellojín murió de la misma discreta manera como vivió, dejándonos un valioso legado que ahora se recoge en estas páginas para que lo puedan admirar tanto aquellos que lo conocieron, como quienes, a través de esta publicación, descubran su talento, rigurosidad, destreza, perfección y sobriedad, características que envuelven su obra.
Este libro realiza un fascinante recorrido por la obra completa de Manolo Vellojín, desde sus primeras creaciones como: Señal de vida en contravía, Variaciones, Sudarios e Hipnótico, pasando por sus series más reconocidas, como Dolorosos, Esquelas, Salmos, Cruzadas, entre otros, hasta llegar a su últimas producciones: Ascensiones y Constelaciones.
Al igual que en los últimos años, Ediciones Gamma estuvo al frente de la realización de esta publicación, que en un formato de lujo de 300 páginas, destaca las obras de Vellojín entre 1965 y 2013.
A modo de conmemoración por su legado, Davivienda llevará a cabo el lanzamiento del libro y la exposición de varias de sus obras en el Antiguo Edificio de la Aduana de la ciudad natal del pintor, la cual permanecerá para deleite de los barranquilleros del 22 de noviembre al 15 de diciembre de 2018.
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